Dejando a un lado los materiales caros y el lujo obvio, estos interiores conservan una sensación de tradicionalismo mediante el uso de papel de arroz, marcos de madera rubia, orquídeas cuidadosamente colocadas y rasgos florales de seda constreñidos.
Cada vez se incorporan más piezas blancas y piezas de plata sin comprometer la funcionalidad o el tamaño de los interiores. Su efecto de bajo impacto y alto estilo puede atribuirse sobre todo a la ausencia de un color dominante.
El cuarto de baño sedimentario de Leung, bellamente ejecutado, como arenas del desierto coloreadas en una botella de cristal, marca un cambio en las paletas. Las puertas de papel de arroz blanco se abren para revelar una brillante y espectacular incursión en tonos grises contrastados. La restricción del estilo se refleja en una iluminación limitada que depende en gran medida del reflejo de las superficies para canalizar la poca luz que hay.
